RENATA y la innovación educativa en las Instituciones de Educación Superior – Rafael Rodríguez
La coyuntura que vive el mundo actualmente ha hecho que la tecnología esté presente en la educación, pues la virtualización y la digitalización de los procesos académicos se convirtieron en un requerimiento de trabajo con los estudiantes.
Este contexto, ha obligado a las Instituciones de Educación Superior a ir más allá, con el entendimiento y construcción de ecosistemas académicos digitales que integran: (1) nuevas metodologías de trabajo, (2) innovaciones de los modelos de interacción y, en especial, (3) adopción y apropiación como elemento cultural, los nuevos recursos que propone la tecnología, la investigación, la innovación y la ciencia.
En esta perspectiva, el desafío para las instituciones de educación superior, consiste, entre otros elementos, en realizar un esfuerzo por establecer estrategias que les permitan promover la innovación entre investigadores, docentes y estudiantes más allá de tener estrategias de implementación de tecnología a los procesos de enseñanza -aprendizaje, sino también promover y mantener el desarrollo y producción de iniciativas, proyectos o productos que coayuden para el desarrollo social y económico del país.
Es allí, donde la innovación tiene una arista importante; pues su comprensión, desarrollo e implementación de estrategias formales en el ámbito educativo permitirán articular el conocimiento institucional con los requerimientos de la comunidad.
En este sentido, la Unesco (2016) define la innovación educativa como:
Un acto deliberado y planificado de solución de problemas, que apunta a lograr mayor calidad en los aprendizajes de los estudiantes, superando el paradigma tradicional. Implica trascender el conocimiento academicista y pasar del aprendizaje pasivo del estudiante a una concepción donde el aprendizaje es interacción y se construye entre todos (p.3).
La comprensión de esta definición implica hacer una reflexión sobre la innovación en los contextos educativos, como la respuesta positiva de las Instituciones de Educación Superior a la constante transformación de la sociedad, la rápida obsolescencia del conocimiento adquirido en relación con el quehacer profesional y retos de frente a las nuevas competencias laborales que requiere el sector productivo actual.
El Ministerio de Educación Nacional desde la Oficina de Innovación Educativa con Uso de Nuevas Tecnologías concibe la innovación educativa como “un proceso que se enfoca en la formación integral de los estudiantes a partir de la creación y apropiación de ideas, conocimientos, metodologías y productos educativos que generan transformaciones en las dinámicas de la comunidad educativa y la cultura escolar, según las necesidades del contexto” .
Fuente: AvanCiencia